Un verano teñido de grises

Comenzamos con El síndrome del verano sin fin ( 2023), ópera prima de la francesa Kaveh Daneshmand, sobre el recurrente y controvertido tema de la pedofilia en marcos familiares.
Una madre de dos niños adoptados se enfrenta a un cuadro difícil  cuando se entera de que su marido puede estar teniendo una aventura con uno de ellos .
La crítica se ha dividido en sus enfoques. Variety, en voz de su columnista Manuel Betancourt considera que "Endless Summer Syndrome , el cual  se presenta como poco más que una provocación vana que termina recurriendo a clichés de incesto y adopción de dudoso gusto (aunque posiblemente de forma intencionada), busca con ahínco explorar sus turbios dilemas éticos. Sin embargo, lo único que consigue es crear el retrato de una familia en decadencia que, sin quererlo, alimenta los debates sobre el único tipo de familias que merecen ser descritas de esa manera: un estudio de padres y madres, de hijos e hijas, que, sea o no intencionalmente, subraya la centralidad de los lazos de sangre".
Marko Stojiljković , de Cineuropa, es más tolerante:
"Puede que no sea perfecta en términos absolutos, pero es un debut sobresaliente que demuestra mucho corazón, mucha reflexión y mucho talento por parte del equipo creativo y el reparto ".
De cualquier manera, el tema, el interés y evolución del relato junto con las centradas actuaciones prometen un encuentro para no rechazar.